VOLVIÓ 24 HORAS POR EL KRILL, de Flavio Arraldes, por Teresa Gatto

 

No es difícil encontrar la parodia para los mayores de 40 años y es un ejercicio de memoria y/o reflexión  para los más jóvenes. Un hecho sangrante de la Historia Argentina. Aquellas 24 hs de la Solidaridad por Malvinas, mostrando su backstage .

 


Por Teresa Gatto

“Los ghurkas siguen avanzando

Los viejos siguen en TV

Los jefes de los chicos

Toman whisky con los ricos

Mientras los obreros hacen masa

En la plaza como aquella vez

Como aquella vez!”

No bombardeen Bs. As. Charly Garcia.

 

 

Pocas veces se dieron discusiones tan acaloradas como en aquel comienzo de abril de 1982, Hacía sólo dos días un pueblo harto había ido a reclamar a Plaza de Mayo nada más ni nada menos que al General Galtieri que sólo reprimió (¿qué otra cosa saben hacer?) , sabiendo en la neblina de su estado etílico que tenía una última maniobra “populista” para permanecer en el poder, para que los militares de la Dictadura más sangrienta de la Historia de éste, nuestro país, se perpetuara. ¿Soñaría Leopoldo Fortunato Galtieri  con que lo llamaran Generalísimo? O tal vez en ser Senador Vitalicio como el asesino “allende” la Cordillera.

El caso es que la Plaza de Mayo volvió a colmarse y la misma masa que había sido reprimida, vitoreó al sujeto que desafiaba al Imperio que nos había quitado las Islas Malvinas en 1802.

Si algo tiene “el pueblo argentino es su patriotismo, patrioterismo, devoción y amor por sus causas, que le duran lo mismo que una noticia en la red. Todo prescribe en 6 meses.

En medio de esa situación desequilibrada en fuerzas, saberes, preparación, armas e insumos,  la televisión organizó las 24 hs por Malvinas. Así, unos garantes de la comunicación se dispusieron a hacer el enorme sacrificio de reunir toda suerte de cosas para los soldados que en aquel páramo helado y adolorido usaban zapatillas de lona rota en la escarcha.

Este prolegómeno es para quienes no habían nacido o eran pequeños. El resto recordamos, a nuestra madre regresar con escarapela de un comercio, las discusiones en las que decíamos que era demencial y en particular la de un señor que me dijo “No quiero discutir tu dialéctica sin sentido”, Licenciado en Ciencias Políticas, había olvidado todo, porque los argentinos somos derechos y humanos y además, cuidamos la soberanía.

En este contexto transcurre 24 horas por el Krill. Si usted no lo consume queda advertido de que su salud cardiovascular va a menos. Ese camaroncito de 5 pares de patas, transparente y con ojos negros saltones, es una fuente de vida. Y ¡Cuidado¡ la especie más codiciada es la Antártica y la Atlántica. Imagínese que hasta el Papa Francisco lo tiene en la dieta. Este nombre que parodia a aquellas 24 hs, dará cuenta de una ficcionalización de la realidad que no dudo se ancle en hechos verdaderos.

En un set televisivo los actores: Pato Berardo, Cecilia Capello, Iván Diaz Benítez, Antonella Fittipaldi, Carolina Krivoruk, se ponen en la piel de diversos personajes: un General, una conductora que dice ser la Sra. Televisión, un cantante del melódico de aquellas épocas, una inocente esposa de combatiente que dona su visón, una revolucionaria recién llegada de México.

El público participa porque al llegar le entregan una prenda que donará a un personaje y que irá a parar al cajón de donaciones.

El ánimo festivo que debe salir al aire, se desvaneces el backstage, pero como un in crescendo dramático- Es decir, aunque se escuche la canción de Malvinas desde la calle, aunque haya sonrisas forzadas y canciones todas muy bien interpretadas, existe el desánimo muy bien planteado por su director, Flavio Arraldes, dosifica muy bien y allí reside lo dramático. Afuera y a mucha distancia nuestros soldados están siendo masacrados, ahogados en el Crucero General Belgrano que se hallaba fuera del área de combate. Adentro del set de TV que tuvo en la realidad una audiencia notable porque se transmitió 24 hs corridas y la TV de aquella época no llegaba a 12 hs. de emisión, hay como un ánimo exultante cuando están al aire que se destroza en las pausas publicitarias porque todos están rotos y tal vez porque haciendo futurismo, adelanta el escarnio al que fueron sometidos los participantes de ese programa porque las donaciones no llegaron jamás a los soldados.

Señalo que están rotos dado que nada sale como está previsto, los argumentos se apilan y hasta mezclan pero nadie cree en nadie ni en nada.

La Guerra de Malvinas fue la última en contarse en la gráfica, las siguientes contaron con tecnología que mostraba acciones en el campo de guerra. Esa es una de las razones por las que mentir no era tan pecaminoso, el “Vamos Ganando”, el Mundial del 1982 que se avecinaba, tenía a la población en un estado de exaltación absoluta y la Junta aprovechaba al Pueblo y se aprovechaba o no de sus artistas solidarios.

Buenos trabajos de actuación, buena dirección, un vestuario muy logrado de los años ’80 de Maite Corona, la música acompañando en vivo bien interpretada se deslizan en un tobogán de frustración igual o peor que la tuvieron los incautos que pensaron que una Guerra contra Inglaterra era una opción válida para recuperar las Islas.

Lo sobrevivientes regresaron de madrugada y no hubo TV en directo para mostrar el desvanecimiento en sus miradas vacías del horror. Había que esconderlos.

24 Hs por el Krill es semi metafórico como paratexto que da título a la obra. Porque sí hay Krill y sí hay una situación geopolítica indiscutible y si hay que saber que hoy sin declamaciones del tipo “Si quieren venir que vengan, les presentaremos batalla”, se siguen jugando estos intereses (los actores que explican qué es el Krill) y como corolario de una derrota infinita, tenemos un mandatario que admira con vehemencia a Margaret Thatcher. La mujer siniestra que dijo “Hundan al Belgrano” y que años después ratificó que volvería a hacer lo mismo.

Quedan 3 funciones en un teatro precioso como es El Grito en Palermo y hay que sacudir la Memoria. El teatro es un reavivador de interpelaciones.


 

 

Ficha Artístico/Técnica

Dramaturgia y dirección: Flavio Abraldes

Actúan: Pato Berardo, Cecilia Capello, Iván Diaz Benítez, Antonella Fittipaldi, Carolina Krivoruk

Diseño de vestuario y escenografía: Maite Corona

Realización de escenografía: Walter D. Lamas

Realización de vestuario: Atelier Lau Pérez

Diseño de iluminación: Ricardo Sica

Fotografía: Cesar Capasso

Comunicación y prensa: Mutuverría PR

Coreografía: Diego Amorín Hermeto, Cecilia Capello

Asistencia de dirección: Karla Sufi

 

Duración: 80 minutos

¡ÚNICAS 4 FUNCIONES!

¡DESDE EL 4 DE ABRIL!

JUEVES A LAS 21 HORAS

 

Teatro El Grito - Costa Rica 5459

Entradas desde $6.000

En venta por Alternativa Teatral

Los Compadritos, de Roberto “Tito” Cossa, dirigida por Gerardo La Regina. Por Teresa Gatto.