La obra escrita y dirigida por Sabatino Cacho Palma, protagonizada por Pablo Razuk, es más que un homenaje a García Lorca, es un juego para que el espectador sueñe y alucine los últimos días de poeta de Fuente vaqueros y agradezca su existencia
Por Teresa Gatto
"El poema puede hacerse un ovillo pero es para volver otra vez sus signos agudos hacia afuera. Puede por cierto reflejar la lengua o decir la poesía pero no se refiere nunca a sí, no se mueve nunca por sí mismo como esas máquinas portadoras de muerte"
Jacques Derrida en Che cos’è la poesia?
¿Comienza o no? No sabemos. Lo que si comienza con seguridad es el juego. Es una intimidad, un secreto a voces, una complicidad que se establece entre el espectador y el actor.
Bueno, juguemos. ¿Acaso el teatro no es lúdico? Jugamos a que si tú verosímil está bien construido nos lo creemos y hacemos como qué...
Pero esta obra se trata de Federico García Lorca, de sus disquisiciones sobre si volver a Granada o no y sobre si, su condición de “invertido” (palabra nefasta) o poeta, o contrario al asesino Franco son los que lo llevarán a un “no lugar” que es donde descansan los desaparecidos en todos los regímenes de facto de la tierra que no pueden ser sepultados.
Entonces comenzamos a remar con él, remamos la poesía, la obra inconclusa, la barraca. Remamos el río del olvido, ese que cruzan los muertos pero magistralmente no olvidamos nada.
Vamos, si desde la escuela y sin ser españoles sabemos todos algún poema de Federico pero si ya se apropia de mi
“Por el olivar venían
Bronce y sueño, los gitanos
Las cabezas levantadas
Y los ojos entornados”
No vayas a Granada amigo, no lo hagas, porque ya está escrito que el 12 o el 18 de agosto de 1936, las bayonetas se harán de tu cuerpo que no podremos recuperar.
Pero si no le han metido preso con Bernarda ¿porqué lo harían ahora?
Porque el asesino tiene abstinencia, porque tiene sed de lo que jamás será su vida: poesía
“¡Ay qué trabajo me cuesta
quererte como te quiero!
Y te quedas a morir y a mutar.
La Dirección de Sabatino Palma explota lo mejor de Pablo Razuk. Ese modo de romper la cuarta pared para abjurar de convenciones decimonónicas y establecer muchas complicidades con quiénes lo receptamos. La luz, el vestuario y la operatividad de los trastos escenográficos colaboran con la puesta sin manipular la historia a re-presentar ni al espectador.
Este actor magnifico, camabirá de traje todo el tiempo y con él, cambiará el ser de su personaje, será Federico, será sus amigos, será elespectador que aguarda que el poeta termine esa Comedia inconclusa.
El//la que no será igual es usted, usted saldrá de la sala íntima y perfecta para esta puesta, mutado. Con unas ganas irremediables de leer poesía e irá a su biblioteca u ordenador porque recuerda, porque Razuk le está proponiendo una rememoración y entonces se le agolparán aquello versos
“Y que yo me la llevé al río
creyendo que era mozuela,
pero tenía marido”
Pero sea como sea, Federico se ha metido en su piel, Razuk también y lo mejor: si usted es un ser decente y noble se cuestionará: ¿Cuánto de fuerte es la voz de un poeta que un régimen asesino se lo lleva, creyendo que existe un infierno de diversos y disidentes? Cuando lo único que existe es un cielo de poetas y artistas inolvidables y entonces recordará aquello de
Dando gritos, los gitanos
El aire "lo" vela, vela
El aire"lo" está velando
Ficha Artístico/Técnica
Autor: Sabatino Cacho Palma
Actúa: Pablo Razuk
Vestuario: Pablo Razuk, Vera Rinaldi
Escenografía: Pablo Razuk
Realización de video: Marcela Marcolini
Fotografía: Nacho Pared
Diseño gráfico: Roy Cifre
Producción: Korinthio Teatro
Dirección general: Sabatino Cacho Palma
Duración: 55 minutos
Clasificaciones: Teatro, Presencial, Adultos
KORINTHIO tEATRO
CHARCAS 2737
Capital Federal - Buenos Aires - Argentina
Teléfonos: 1166601918
Web: http://www.korinthioteatro.com.ar
Entrada: $ 900,00 / $ 600,00 - Domingo - 19:00 hs - Hasta el 31/10/