Juicio a una zorra o larga vida a las Helenas



La obra escrita por Miguel del Arco, alcanza en la actuación de Paula Ransenberg una mixtura entre inmortalidad y fugacidad que deslumbra por los matices y la entrega, es evidente que Corina Fiorillo sabe lo que es dirigir a una de las mejores actrices de nuestro país.

Por Teresa Gatto

“Y recuerda, si puedes, un incidente que mostró el poder de la belleza
en vivísimos colores es aquel en que los graves consejeros de Príamo,
 al presentarme, me miraron asombrados y no se atrevieron a imputarme
la causa de la guerra que casi había devastado el país”
Ana Leticia Barbault
Diálogo de los muertos — Entre Helena de Troya y Madame de Maintenon.

 

Muchos estudios críticos señalan que es casi imposible concebir a los personajes homéricos de modo pretérito. Y esto no es del orden del tiempo sino del orden del mito que cada subjetividad apropia cuando un caballo de madera como engañifa o un hombre capaz de vencer a un cíclope se presentan como la épica posible ya no en términos de poesía, sino en términos de posibilidad de lucha.

Juicio a una zorra no es ni más ni menos que la re-presentación de Helena de Esparta y/o de Troya, haciéndose cargo de su parte y sometiendo a debate todas y cada una de las culpas que le endilgaron, los vejámenes sufridos desde sus 9 años y el ser una mujer cuya belleza alcanza dimensiones mitológicas y que como buena espartana le hace honor a aquel cuento en el un chasqui llegaba a Esparta trayendo noticias de la guerra y una mujer le preguntaba:

-¿Ha salido Esparta victoriosa?

-Tu hijo murió en la guerra.

-No te pregunté eso, te pregunté su Esparta salió victoriosa.

La guerra desatada o Hermione, la hija abandonada, no son el desvelo de Helena.

Porque lo desanda narrando desde  su nacimiento semidivino, es la existencia de un patriarcado que todo lo subsume a ganar, mandar y hacer obedecer.

Entonces Helena se somete a propio juicio por la guerra más famosa del mundo y mientras entre cachengue y bataclana cuenta su vida, es capaz de dar una clase de mitología griega en la que en que no sabe, aprende y el que sabe comprende.

Así desde su nacimiento concebido de modo infrecuente desfilan los personajes que son parte de su devenir Zeus, Leda, Teseo que la posee a los 9 años,  Clitemnestra y hasta cae la Penélope tejedora eterna que parece que tejió menos que lo que estuvo decúbito con sus pretendientes.

Con Paris llega el amor verdadero, la huida y lo que luego será poema homérico. La guerra y los muertos de los dos bandos y la caída de Troya.

¿Es un error amar? Interpela. Esa pregunta no tiene respuesta. Lo que sí se puede aseverar sin ninguna duda que una de las mejores actrices de nuestro tiempo Paula Ransenberg, dirigida por Corina Fiorillo, transita el espacio escénico con firmeza, que el texto le pertenece porque lo ha hecho carne, que no hay diferencia entre ese espacio y el escenario porque ella lo completa todo.

Y sólo tiene un caballo muy kirsch que sirve de escalera y de sinécdoque  y que cuestiona, siempre desde su verdad, aquellos motivos que no por eternos son menos valiosos y no encuentran respuesta.

Las mujeres seguirnos siendo el motivo más débil y fuerte para culpar. Una moneda de dos caras en la que la resiliencia y la vulneración constante hicieron acuñar el término Feminicidio recién en los 90’.

La buena noticia es que a Helena se la perdonó y continuó viva en la literatura y en la mente de todos y cada uno de los que vean la obra. Porque estas dos mujeres (Ransenberg y Fiorillo) no se andan con chiquitas y demuestran que siempre se puede dar algo más, que siempre un texto fantástico como el de Miguel del Arco puede encontrar la voz y el cuerpo a total disposición para ser.

El diseño de arte (escenografía y vestuario) de Gonzalo Córdoba Estévez, la iluminación de Ricardo Sica precisa como siempre y la sala colmada completan el placer infinito de ver esta puesta en la todo lo que reluce es oro, “oro Ransenberg”.


Ficha Artístico/Técnica

Dramaturgia: Miguel Del Arco
Intéprete: Paula Ransenberg
Diseño de maquillaje: Norbi González Moreno
Diseño de vestuario: Gonzalo Córdoba Estévez
Diseño de escenografía: Gonzalo Córdoba Estévez
Diseño de luces: Ricardo Sica
Realización de escenografía: tramoyistas
Fotografía: Francisco Castro Pizzo
Asistencia de iluminación: Diego Becker
Asistencia de dirección: María García De Oteyza
Asistencia De Escenas: Matías Fernández
Prensa: Antonela Santecchia
Producción: Maxime Seugé, Jonathan Zak
Dirección: Corina Fiorillo
TIMBRE 4
México 3554
Capital Federal - Buenos Aires - Argentina
Teléfonos: 4932-4395
Web: http://www.timbre4.com
Entrada: $ 350,00 - Domingo - 19:15 hs - Hasta el 11/11/2018 y 25/11/2018
Entrada: $ 350,00 - Viernes - 17:00 hs - 19/10/2018
Entrada: $ 350,00 - Viernes - 22:15 hs - 02/11/2018
Entrada: $ 350,00 - Sábado - 20:30 hs - 10/11/2018
Entrada: $ 350,00 - Jueves - 21:00 hs - Del 15/11/2018 al 22/11/2018

Los Compadritos, de Roberto “Tito” Cossa, dirigida por Gerardo La Regina. Por Teresa Gatto.