Hasta el 25 de junio se presenta Poder absoluto de Roger Peña Carulla, con dirección de Oscar Barney Finn. Una encuentro puertas adentro con la derecha y el poder. Una pregunta acerca de los límites de lo absoluto. Los sábados a las 20 hs. en El Tinglado.
Por María Luciana Gandolfo
Viena a fines de los años 80. Arnold Eastman (Carlos Kaspar), amante de Puccini y de los tulipanes, es un político perteneciente al partido de derecha, de larga trayectoria y renombre. En la intimidad del armonioso y prolijo jardín de invierno de su casa, recibe a Gerhard Bauer (Gonzalo Heredia), un joven miembro del partido, hábil y ambicioso.
En ese espacio de privacidad, ambientado con estilo, en un justo juego de clasicismo y modernidad, eco de una conjunción entre conservadurismo y progreso, ambos discurren acerca de la candidatura a la presidencia de Eastman. Alternan camaradería y cinismo mientras lanzan álgidos argumentos sobre su anclaje en el poder.
Pero un secreto del pasado afecta la figura política de Eastman y pone en riesgo su candidatura. Bauer es el único que puede evitar que el secreto se devele. A partir de allí, ese tejido de argumentos discursivos que cimentaba el diálogo y que reforzaba el orden de lo establecido en materia de gobernabilidad, comienza a deshilacharse y a mostrar por debajo un terreno demasiado sucio. Eastman persuade a Bauer para “limpiar el terreno”, exactamente en el sentido en el que limpiar implica ensuciar aún más. Frente a una tensión creciente, lo que era un diálogo termina siendo un enfrentamiento y comienza así a trazarse un nuevo mapa de relaciones entre ambos.
Cuando el ejercicio de poder es llevado a cabo sobre ese terreno, la premisa parece ser la desconfianza, incluso entre copartidarios, porque el cuadro de estratagemas puede virar en cualquier momento de dirección. Ahora cualquiera puede dar un paso en falso. Un pacto puede significar una condena. Un plan puede derrumbarse en cuestión de segundos.
La habilidad discursiva se pone a prueba en una verdadera esgrima verbal sobre la que va desenvolviéndose la trama en toda su complejidad y con ella toda una reflexión acerca de la gobernabilidad y el poder absoluto. Aquel poder que se ejerce sin contemplaciones, de manera eficaz, tras la búsqueda de fines claros para lo que cualquier medio resulta válido. Pero ante lo absoluto que es también una forma de lo desmedido, la fuerza de un secreto puede ser un límite.
Poder absoluto evidencia ese límite, porque lleva a escena un mecanismo de entramados ocultos,el detrás de escena de la derecha. Y si bien está ambientada en Austria, su lectura trasciende un tiempo y un espacio concreto, porque muestra un funcionamiento común. El de aquella pesada maquinaria silenciadora y sucia que se sustenta en paradojas y contradicciones para esgrimir sus relatos acabados. Queda resonando una pregunta: ¿Puede el poder ser absoluto? ¿O se desmoronará éste por el propio peso de su maquinaria totalizadora?
Ficha Artístico/Técnica
Dirección: Oscar Barney Finn
Autor: Roger Peña Carulla
Intérpretes: Gonzalo Heredia, Carlos Kaspar
Vestuario: Paula Molina
Peinados: Ricardo Fasan
Diseño de espacio: Oscar Barney Finn
Diseño de luces: Claudio Del Bianco
Realización de escenografia: Eduardo Spindola
Fotografía: Andrés Eraso
Diseño gráfico: Leandro M. Correa
Asistencia de dirección: Agustina Barach
Prensa: Duche&Zarate
Producción ejecutiva: Mónica Benavidez
Producción general: Paulo Brunetti
Puesta en escena: Oscar Barney Finn
FUNCIONES:
Sábado - 20:00 hs - Hasta el 25/06/2016
EL TINGLADO TEATRO
Mario Bravo 948 CABA
Teléfonos: 4863-1188
Web: http://www.teatroeltinglado.com.ar
Entrada: $ 250,00
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