Por Natalia Gauna
“Aquí se incide en la opinión pública aunque no sea pública la opinión”, dice el elenco de El Bachín Teatro en su nuevo espectáculo, “Fidel-Fidel: conflicto en la prensa”.
La historia transcurre en una redacción de un diario argentino a finales de 1958 y previo al triunfo de la revolución cubana, el acontecimiento que cambiaría la historia del mundo occidental. Un grupo de periodistas esperan en su lugar de trabajo noticias sobre lo que sucede en aquella isla del Caribe, por entonces, desconocida e insignificante para aquellos que abogaban por mantener un status quo de formas colonialistas. Pero, las novedades llegan a cuentagotas y la incertidumbre se apodera de esta redacción. A su vez, cada uno de los personajes desarrolla su propio conflicto personal. Carolina Guevara es Silvia, una mujer con fuertes convicciones ideológicas y enamorada de uno de sus compañeros. Una vez más, la actriz demuestra su solvencia artística y la destreza en la creación de un personaje con matices de marioneta, como si cada uno de sus movimientos fueran manejados por hilos, y al cual el resto del elenco se sumará. Por su parte, Marcos Peruyero y Julieta Grinspan se destacan con pasajes de humor que causan carcajadas en la platea.
Ahora bien ¿por qué los personajes se parecen más a muñecos que a seres reales en un teatro político? La clave está en la tradición brechtiana de El Bachín Teatro. El aparato se pone de manifiesto, se revela el artificio, para posibilitar el distanciamiento y el discurso meta-teatral: el espectador sabe que está en el teatro. Por ello, el gran acierto de este espectáculo es lo meta-discursivo en torno a ciertas preguntas implícitas: ¿Cuál es la función del teatro? y ¿Por qué decidimos participar?
Para quienes conocen el camino recorrido por El Bachín la ruptura de la cuarta pared no es una sorpresa sino más bien un elemento necesario e indispensable en la búsqueda estética de este grupo de actores muy bien comandados por Santos Iñurrieta.
Fidel-Fidel condensa el transcurrir de la compañía. Pone en escena todos los ingredientes que ya no pueden faltar en su definición de lo teatral: lo épico-político, la reflexión estética y la búsqueda de una forma y estilo actoral. Sin embargo, lo temático aparece un tanto más borrado. Si bien está claro que los acontecimientos de la Revolución Cubana son el gran tema también resultan la gran excusa para abordar y problematizar otra decena de tópicos como la verdad y el rigor periodístico, la historia de las sociedades occidentales, el capitalismo y el consumismo como sistemas de dominación cultural y la historia local recorrida a través de audios que guardamos en la memoria colectiva como el “Si quieren venir que vengan”, “El que depositó dólares recibirá dólares” y algunos más recientes como “La gente dice ‘que se vayan’” o “Se viene el zurdaje”, frases poco felices de personajes del mundillo político-farandulero.
Finalmente, Fidel-Fidel se construye como una gran narración de todos los tiempos desde su prólogo hasta el epílogo del director que bien podría leerse como la editorial de este espectáculo o de la próxima edición del diario. “Alguien que escribe” una aproximación, como reza el cartel final, a la verdad de todas las cosas.
Ficha Artístico/Técnica
Texto: Manuel Santos Iñurrieta
Actúan: Alfredo Aguirre, Jerónimo García, Julieta Grinspan, Carolina Guevara, Manuel Santos Iñurrieta, Marcos Peruyero
Intérpretes:Pablo Grinspan
Vestuario: Agustina Filipini
Escenografía: El Bachín Teatro, Marcos Peruyero
Iluminación: El Bachín Teatro
Audiovisuales: Jerónimo García
Música original: Julieta Grinspan, Pablo Grinspan
Fotografía: Nicolás F. Blanco
Asistencia técnica: Marina García, Diego Scandroli
Prensa: Debora Lachter
Arreglos musicales: Pablo Grinspan
Puesta en escena: Manuel Santos Iñurrieta
Dirección: Manuel Santos
CENTRO CULTURAL DE LA COOPERACIÓN
Corrientes 1543 - Capital Federal - Argentina
Web: http://www.centrocultural.coop
Entrada: $ 120,00
Funciones: Sábado a las 20:00 hs - Hasta el 26/09/2015
