Pudor en animales de invierno

 



Luego de haber participado del VIII Festival Internacional de Teatro de Buenos Aires vuelve a escena una obra imperdible de Santiago Loza dirigida por Lisandro Rodríguez.

por Julia Laurent

“Un animal es también la jaula que lo contiene”
Pudor en animales de invierno

Pasado, presente y futuro en la noche tarde y apretada de un departamento.
Padre e hijo se recorren así mismos en el silencio del pudor que trae consigo el paso del tiempo.
Pudor en animales de invierno es el afán de esos cuerpos por liberarse al menos un rato del decoro y las pesadas pieles.

Actualmente Santiago Loza cuenta con cinco obras en cartel como dramaturgo, una característica que comparten sus textos es la de no presentar personajes de comportamientos fijos y predeterminados sino un relato construído entre los vestigios de la contradicción y siempre revelándose ante la fórmula prescripta. Personajes curtidos por el tiempo que el espectador agradece siempre.

Es clave también el tratamiento cinematográfico que desarrolla Santiago Loza en su dramaturgia, produciendo una trama repleta de detalles que como primeros planos nos conducen a lo recóndito de las escenas, hasta que de repente sin aviso un plano general de la acción nos arrastra bien lejos en un vaivén exquisito y nunca predecible.

En Pudor en animales de invierno es encantador además descubrirse un voyeaur que en la oscuridad de la sala se entromete una y otra vez en el reducto de un departamento donde padre e hijo se disputan el tiempo.

Un pasado representado que se construye con disonancias del presente, como un flashback el relato se compone de representaciones a través de la memoria del hijo interpretado por Martin Shanly, quien despliega con precisión distintos recursos para detener el relato y anticipar los hechos.

Santiago Loza posee la lucidez de recuperar en su teatro una memoria capaz de reproducirse tantas veces como sea posible, conjuga en sus obras la parábola del tiempo que exaspera a la condición humana, permitiendo una identificación cruda y cercana con el espectador.

Es muy interesante el trabajo de la escenografía a cargo de Mariana Tirantte que lejos de ser un decorado trivial y convencional participa al servicio de los actores. El marco de la escena es la fachada de una casa con ventanas por donde es posible observar sin ser descubiertos.

Lisandro Rodríguez interviene durante toda la obra con música en vivo. Un director que elije observar junto a los espectadores su propio legado.

Una obra impecable que sustenta reflexiones claras acerca de las convenciones que imponen las prescripciones familiares, los tabúes y las restricciones precisas entre sus integrantes, los aciertos y voracidades de una relación tan mítica y sanguínea como el hombre mismo.


Ficha Artística/Técnica:

Autor: Santiago Loza
Dirección: Lisandro Rodríguez
Asistencia de dirección: Sofía Salvaggio
Padre: Ricardo Félix
Hijo: Martín Shanly
Mujer en la heladera: Valeria Roldán
Música en vivo: Lisandro Rodríguez
Escenografía y Vestuario: Mariana Tirantte
Producción: Maria Sureda
Iluminación: Matías Sendón
Prensa: María Sureda
Fotografía: Nora Lezano
Duración: 60'

Funciones: Viernes y Sábados a las 21:00
Entradas: $50/$35

El Camarín de las musas
Mario Bravo 960 (mapa)
Ciudad de Buenos Aires, Argentina
Tel.: 4862-0655
http://www.elcamarindelasmusas.com


MAS CENIZA, escrita por Juan Mayorga y dirigida por Adrián Cardozo, por Teresa Gatto