Por Ana Ortiz
Así se cuenta una anécdota.
Se me hace difícil empezar, la obra trata tantos temas que no se si podré desmenuzarlos todos.
Empecemos por el principio entonces, dos amigos.
No.
El principio es dos policías, dos policías amigos.
Dani y Rodo, dos policías amigos de toda la vida, dos amigos de toda la vida con carrera de policía, aspirantes a detectives. El que se las sabe todas es Dani (inmensamente interpretado por Rodrigo de la Serna), el que siempre estuvo bajo su protección es Rodo (interpretado por Joaquín Furriel).
La amistad hombre-hombre da la entrada a este mundo, la amistad hombre-hombre, simple, práctica. Siempre me gustó la manera en que se llevan los hombres, tan francos, honestos, sin miedo a gritarse, romperse la cara de un puñetazo para después tomarse una cerveza con el ojo morado y carcajadas. No guardan rencor, perdonan rápido y olvidan.
Todo lo que une a estos amigos de siempre, los separará cuando una serie de episodios cuestione su escala de valores, sus prioridades y tire por la borda todas las certezas de sus vidas.
"Como el mundo está ahogándose con la sangre que se derrama, porque hay locos que se cogen pibes y después les comen el hígado y entierran a sus víctimas en sus jardines, porque les prenden fuego, porque le disparan a tu bebé de 2 años por la ventana de tu casa, ¿entonces tienen que tirar a uno de nosotros dos a los perros? ¿Nos sacrifican para qué? ¿Para qué? No le encuentro ninguna lógica a nada de todo esto” (Dani)
La historia es contada en primera persona, como una anécdota que le cuentan a todo el público presente. Rodrigo De la Serna y Joaquín Furriel logran a través de sus relatos llevarnos por una hora y media dentro de un policial. Un policial que podría ser el que vive cualquiera de la bonaerense, pero Dani y Rodo, nuestros personajes, nos van adentrando además en sus historias personales; el trabajo se mezcla con la familia, la amistad se vuelve oscura, el aire se pone denso y la lluvia, la lluvia que no para nunca.
No solo sus personajes logran llevarnos por miles de escenas sin cambiarse jamás de vestuario, sin salirse nunca de escena, sino que la puesta esta tan bien pensada que una lata de cerveza se convierte en un vaso de café sin necesidad de usar dos elementos, un palo es un rifle, una llanta un almohadón y así pocos objetos pasan a ser los actores principales para contar la historia, para transportarnos por escenarios, situaciones y vivencias llevándose de viaje hasta al más incrédulo.
Rodrigo De la Serna pone todo su cuerpo a disposición de esta interpretación, mucho esfuerzo físico arriba del escenario, muchas transformaciones solo con la inspiración divina de un actor que logra contar la misma anécdota desde la piel de todos los que son parte de ella.
Esta actuación quedará en mi memoria, como ejemplo de lo que significa conectar el cuerpo con la mente, como ejemplo de lo versátil que puede ser una persona. Me creí cada uno de sus movimientos, lloré con su pena, me reí con sus chistes, seguí cada paso de sus persecuciones y me asusté con sus disparos. No actúa, está viviendo la experiencia, la diferencia es notable y como espectador muy placentero.
Los hombres disfrutarán de esta obra riéndose con los códigos internos de una amistad masculina y la acción constante e intensa que sucede sobre el escenario. Las mujeres conectarán con la emoción y conmoción de sus personajes.
Es una obra de acción y suspenso.
No.
Es una obra de reflexión y emoción.
No.
Es una historia bien contada.
En Broadway, se estrenó el 29 de septiembre de 2010 en el Schoenfeld Theatre, protagonizada por Hugh Jackman y Daniel Craig bajo dirección de John Crowley, batiendo a la fecha el récord de espectadores semanales en Broadway para una obra teatral no musical.
Ficha Artístico/Ténica
Autor: Keith Huff
Versión: Federico González Del Pino, Fernando Masllorens
Actúan: Rodrigo de la Serna, Joaquín Furriel
Diseño de vestuario: Mariana Polski
Diseño de escenografía: Alberto Negrín
Diseño de luces: Albert Faura
Sonido: Pablo Abal
Diseño gráfico: Romina Juejati, Gabriela Kogan
Asistencia de escenografía: Lucía Kazanietz
Asistencia de dirección: Sebastián Pollito
Producción ejecutiva: Carla Carrieri
Producción general: Pablo Kompel
Dirección de Producción: Ariel Stolier
Jefe de escenario: Sebastián Pollito
Supervisión técnica: Jorge H. Perez Mascali
Dirección: Javier Daulte
Funciones:
Miércoles y Jueves: 20:45
Viernes: 21:30
Sábados: 20:00 y 22:00
Domingos: 20:00
Entradas desde: $ 100,-
Paseo La Plaza
Av Corrientes 1660, Ciudad de Buenos Aires
Tel.: 6320-5350
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