"El precio" o de la eternidad de Arthur Miller



El precio de Arthur Miller dirigida por Helena Tritek, redimensiona una obra que sigue siendo inmensamente productiva para pensar la sociedad.

Por Teresa Gatto

Arthur Miller no dejó nada de la sociedad norteamericana fuera de su poética. Con un realismo prolífico en ésta y otras latitudes, refleja lo esencial de un modo de ser, de vivir y sostener una realidad que muchas veces asfixia pero que no tiene retorno. Los hombres en su lucha por hacer un porvenir en un espacio que duele y oprime, las mujeres como variable de ajuste de un sostén familiar siempre precario y siempre en estado de angustia.

Desde 1968, fecha de su estreno en el que ganó el Tony Award, El precio se ha representando en EEUU y en Argentina lo hizo de la mano nada menos que de Raúl Rossi, Oscar Ferrigno, Myriam de Urquijo y Fernando Labat, bajo la dirección de Román Viñoly Barreto. El precio es aquello que le ponemos al pasado cuando ya no alienta ni sirve y al deshacernos de las cosas que ya no nos sirven porque nuestra vida debe dar un giro, también le ponemos un precio a las decisiones que tomamos y que nos llevan a replantear qué hicimos con nuestras vidas.

La versión que sube a escena en el Teatro Liceo, diriga por Helena Tritek, tiene como protagonistas a un matrimonio encarnado por Selva Alemán en la piel de Esther que espera que algo cambie el rumbo de las cosas, su esposo Arturo Puig, será Víctor, un policía que pone en venta una innumerable cantidad de objetos que como saturación del espacio, saturan también el ambiente hasta volverlo irrespirable. Hay que deshacerse de todo, con esos trastos, tal vez se vaya el pasado.

Pero el pasado es renuente, es una huella y también una cicatriz, la presencia de Walter, el hermano exitoso de Víctor, en un gran trabajo de Antonio Grimau, es un espejo retrovertido del fracaso de su hermano. Él es un exitoso cirujano, la otra cara de las decisiones, cuando éstas son acertadas. Salomon, en un brillante desempeño de Pepe Soriano, deberá ser quién ponga el precio a todo lo que se ha acumulado y en rigor de verdad, el precio que se alcance es el precio del pasado y sus sinuosos caminos de fracaso. Lo interesante es que no hay ganadores, pues Víctor ha dejado todo por sostener a su padre y se halla en la peor situación pero Walter, triunfador y conocido, está solo y su éxito es proporcional a su soledad y a su desequilibrio emocional que amenaza a colapsar.

Esther, es quien sostiene el delicado equilibrio y aprehende que ningún precio puede alcanzar el costo emocional que se ha sufrido. El desván lugar donde se tensiona la acción es el espacio en que estos personajes deben renegociar el pasado próspero devenido en falta por la crisis del 29 que tanto circula en la obra de Miller.

Buenas actuaciones, ajustada dirección y gran recreación de época que se apoya en el diseño escenográfico del laureado Eugenio Zanetti y la iluminación de Ariel del Mastro, junto a un buen diseño de vestuario de orden mimético que colabora con una historia de Miller que no pierde vigencia. 


Ficha Artística/Técnica:

Dramaturgia: Arthur Miller
Versión: Federico González Del Pino, Fernando Masllorens
Actúan: Selva Alemán, Antonio Grimau, Arturo Puig, Pepe Soriano
Vestuario y Escenografía: Eugenio Zanetti
Iluminación: Ariel del Mastro
Asistencia de dirección y Producción Ejecutiva: Edgardo Alba
Producción: Diego Romay
Dirección: Helena Tritek


Funciones: Domingos y Sábados 21:30 / Miércoles, Jueves y Viernes 20:30 / Sábados 21:30
Liceo. Rivadavia 1499 (y Paraná) (mapa) Ciudad de Buenos Aires
http://www.multiteatro.com.ar/Teatros/3-Liceo.aspx
Entradas desde: $ 80,- 

Los Compadritos, de Roberto “Tito” Cossa, dirigida por Gerardo La Regina. Por Teresa Gatto.