Por Teresa Gatto
Habiendo heredado el gusto por la renovación de antiguas prácticas teatrales y no abandonando nunca el espíritu de trasgredir y mortificar los límites que éstas tenían, vieron la luz en marzo de 2002 con la inauguración de El Abismo en el Teatro Municipal de Morón. Se podría enunciar que sus trabajos se anclan en una búsqueda constante que fusiona teoría y práctica. En la idea de adaptar técnicas añejas a distintos y novedosos modelos, sus espectáculos apuestan a la subversión, remozamiento, traspaso de límites y a una provocación implícita que grita que todavía se pude innovar. Además de El Abismo, han subido a escena Libros de Piratas, El Cuerpo de los Condenados, SHHH, Los Sonámbulos, Día de Campo, etc. Han dictado seminarios de investigación y práctica escénica en diversas ciudades del interior del país, han favorecido la práctica teórica con trabajos de investigación como Con los Cinco Sentidos (en teatro para niños) y El Rastro de la Infamia (en teatro y archivo histórico) que forma parte del proyecto etnográfico "Cruce de Espacios Compartidos" entre Tucumán, Buenos Aires, Mar del Plata, Mexico D.F, Mérida y Guayaquil, extendiéndose a Perú y España. El Teatro del Absurdo, el Happening, la Danza Aérea y otras exploraciones de cruce de lenguajes dentro de la práctica teatral como el Circo, la Danza, el teatro Antropológico, el arte del Clown, el humor y el horror también forman parte de sus indagaciones. En torno del estreno de Alle Done, Puesta en Escena conversó con Paula Brusca, Cristian Palacios y Juan Manuel Caputo para acercar a sus lectores la visión de ese arte sagrado que es el teatro para estos creadores.
Parece que hay tantas concepciones del teatro como hacedores ¿cómo se ubican?¿Inscriptos en alguna tradición? O se ven a sí mismos como disruptivos en torno a lo que se viene viendo cuando las vanguardias se vuelven rápidamente obsolescentes.
Cía. Nacional de Fósforos- Somos fundamentalmente hacedores, quizás sin tradición más que la del generar y seguir adelante. Hablando de esas "vanguardias obsolescentes" pienso en una frase de Alain Badiou: cuando el Imperio no censura nada "debemos ser, despiadadamente, nuestros más despiadados censores".
¿Cómo nace la Cía. y cuál es su objetivo fundacional en términos de estéticas?
C.N.F- La Compañía nace hace ya -dentro de poquito- 9 años. Nunca nos imaginamos que perduraríamos tanto tiempo. Nunca tuvimos una estética definida sino más bien una curiosidad siempre inquieta. Esto nos lleva a atravesar por diferentes géneros de espectáculos, generar espacios de gestión cultural, organizar un festival de teatro, dictar talleres, tomar otros, siendo nuestro objetivo principal, como decía antes, el HACER que siempre implica pensar en lo que hacemos.
- Hay en el trabajo sobre Damiens resonancias de Foucault, en términos de vigilar, castigar, aplicar correctivos, encauzar, etc., ¿cómo se trabajaron estos materiales para dar como resultado la obra y un punto de vista que deja al espectador como el gran interpelado?
C.N.F.-“Vigilar y Castigar” fue el punto de partida para la realización del unipersonal, a la vez un capricho y una fascinación con ese texto filosófico tan brutal y visceral. Luego comenzamos a indagar en otros documentos, en otros textos. Aparecieron nuevas preguntas. En algún momento todo giró sobre la relación de las personas particulares con la gran historia del mundo. Cómo intervenimos como individuos en la historia, que era, si mal no recuerdo, una de las preocupaciones principales de Brecht. Luego apareció el tema del hombre ¿qué es un hombre? ¿Cómo podemos saber algo de un individuo que vivió hace tanto tiempo? ¿Cómo podemos saber algo, en realidad, de cualquier individuo, incluso de nosotros mismos? Ahora bien, cómo eso fue pasando a la escena, es un gran misterio. Es decir, no hubo un método analógico. No es que dijéramos, pensamos esto, por lo tanto, tenemos que hacer esto. Damiens fue un espectáculo que nació desde muchas intuiciones que se iban mostrando acertadas o desacertadas, y entonces había que corregir y volver a empezar.
Desde hace un tiempo venimos queriendo destruir la idea de que un texto teatral "comunica" algo que a su vez la puesta debe "comunicar" al espectador. La cosa no es tan simple. Ojalá lo fuera. En realidad, lo que el texto teatral "comunica" es lo menos importante de todo. Puede importar para un informe científico o para un texto filosófico, si se quiere, pero no para el arte. Y menos para el teatro.
-¿Cómo resultó la experiencia de los diversos festivales? ¿Con contextos de recepción distintos se aprecia diversidad o el tema por su universalidad tuvo algún eje común de recepción?
C.N.F.-Las experiencias con Damiens fueron variando de acuerdo a los distintos lugares, claro, siempre que el público cambia, la obra cambia. En Latinoamérica en particular, la obra pega mucho, por nuestra historia. Por la relación de los pueblos latinoamericanos con su historia. Una vez, después de una función, un espectador se nos acercó y nos dijo que Damiens era un espectáculo "para no aplaudir" y no lo decía como una crítica, sino más bien como una reflexión ¿Cómo aplaudo esto? ¿Cómo celebro algo así?
-¿Hay vanguardias en teatro hoy? Por qué hay un pase bastante ostensible entre los que habiendo sido vanguardia no hace mucho pasaron casi sin escalas al teatro comercial y dirigen lo que aparezca. Esto obviamente no sugiere un desprestigio porque de algo hay que vivir, pero sí un corrimiento de lugar que al menos causa un cambio de público…
C.N.F -No sé si se pueden denominar vanguardias... creemos que hoy más que nunca están establecidas las diferencias entre los diversos tipos de teatro y bien definidas sus características intrínsecas. La generación de la vanguardia siguió la lógica propia que éstas contienen, convertirse en objetos valuables, dejando a un lado el espíritu inicial.
Por un lado está bien que haya sido así, porque en el fondo, la vanguardia siempre fue una gran mentira. En un artículo que escribió en 1950 ¡en 1950! o sea: hace sesenta años ya, Gombrich hablaba del arte abstracto, y comentaba que el problema con el arte abstracto era que los artistas que se vinculaban con esa línea, perdían su libertad de crear. Es una gran paradoja, porque lo que parece más liberador, menos coercitivo, es en realidad mucho más opresivo que el arte clásico (y eso lo había dicho, mucho antes que Gombrich, Chesterton, en su famosa paradoja del policía y el anarquista, en “El Hombre que fue Jueves”. O sea, si uno tiene la necesidad de ser siempre provocador, por un lado, no provoca a nadie, y por otro lado pierde su libertad de escribir, actuar o dirigir una obra como ésta lo pida.
Además, hablar de vanguardia es pensar en alguien que está "a la cabeza de". Hoy algo realmente provocador sería pensar en el arte como algo que no evoluciona, que no progresa hacia algo mejor de lo que fue, algo que como todo trabajo y como toda acción de pensamiento, sucede en un momento determinado, para un público determinado. No nos olvidemos que lo más maravilloso que tiene el teatro, es que es absolutamente efímero, intangible.
-¿Cómo nació el proyecto con La Comedia de la Pcia. de Buenos Aires? y ¿Cómo fue el proceso de selección de "Las chicas de Blanco"?
C.N.F.-El proyecto Alle Donne surgió por medio de una convocatoria de la Comedia de la Provincia de Buenos Aires, donde se convocaban a grupos de teatro de la provincia a presentar un proyecto sobre la obra para giras. De la provincia se presentaron alrededor de 20 proyectos y el nuestro fue el seleccionado. Con Las Chicas de Blanco hace un tiempo que veníamos pensando en trabajar en conjunto y nos pareció que esta convocatoria era una buena excusa para poder hacerlo de una vez.
Muchas gracias, le dejamos al lector la información sobre el proyecto para que se acerque a disfrutar la experiencia conjunta de Cía. Nacional de Fósforos, junto a Las Chicas de Blanco.
Gobierno de la Provincia de Buenos Aires
Instituto Cultural- Comedia de la Provincia
El estreno se realizará el 15 de octubre a las 21 en el Teatro Español de Magdalena (Goenaga 875) con entrada libre y gratuita.
Alle Donne- de Roxana Aramburú
Dirección: Paula Brusca (Compañía Nacional de Fósforos)
Alba: Sandra Posadino
Liberta: Claudia Quiroga
Raúl Pedernera: Juan Manuel Caputo
Escenografía y Vestuario: Máximo Panizza
Diseño y puesta de luces: Federico Genovés y Pedro Zabala
Realización sonora: Lucas Alves de Lima
Asistencia de Dirección: César Barella y Laura Otero
“El molino ya no está, pero el viento sopla todavía”
Alle Donne,escrito por Roxana Aramburú, trata sobre el ideal anarquista, los mandatos familiares. El deseo y la culpa, el amor y la muerte irrumpen en las vísperas de una huelga. Es la Semana Trágica. Es diciembre de 1918… o 1955 o 1976. Es una de esas historias que trasciende en tiempo y espacio.
Este texto, que ha recibido distinciones por parte del Instituto Nacional del Teatro y Argentores, es un relato donde se esfuerza a los individuos a decidir cual es y será su lugar frente a la historia.
La Comedia de la Provincia de Buenos Aires decide llevar adelante esta producción, convocando a los grupos independientes de la provincia a que presenten proyectos para su realización. Es así como La Compañía Nacional de Fósforos (Villa Bosch – Tres de Febrero) y Las Chicas de Blanco (Ramos Mejía – La Matanza) resultan seleccionadas para dirigir y representar esta obra.
Uno de los objetivos que se planteó el Instituto Cultural al encarar este proyecto era que la Comedia vuelva a salir en gira con una producción propia. Magdalena, Tres de Febrero, Rojas, San Fernando, entre otras, son las localidades en las que se presentará Alle Donne antes de desembarcar en la Sala Armando Discépolo de la ciudad de La Plata en el mes de noviembre.
Próximas funciones en gira:
13/11: Teatro de las Nobles Bestias
Horario: 21 hs
Dirección: 14 de julio 142 - Temperley (Lomas de Zamora)
14/11: Teatro Martinelli
Horario: 20 hs
Dirección: Lavalle 3021- Victoria (San Fernando)
Algo sobre la obra
Alle Donne se ubica en los intersticios de una lucha que puede ser cualquier lucha, una guerra que como todas las guerras, deja detrás una estela de silencio que es tanto o más terrible que la propia guerra. La imposibilidad de narrar la experiencia, de contarnos nuestra propia historia, que Walter Benjamín describió como una de las más grandes catástrofes del siglo XX, es una de las principales estrategias del poder, que se abalanza sobre los individuos ya no sólo para destruirlos en el espectáculo de la violencia sino también para condicionarnos en el espacio más privado y más íntimo, el de la casa y el del cuerpo. Pero como también describió Walter Benjamín, ese fracaso mismo de la experiencia, ese triunfo del poder sobre los cuerpos, es a la vez, la posibilidad que a cada uno se le ha dado de reinventarse a si mismo, de elegir, entre muchas historias la que habrá de tomar como propia.
En el espacio de una casa, durante los hechos de la llamada Semana Trágica, durante las vísperas de un año viejo y otro nuevo, donde habitan tres mujeres solas se desarrolla este relato de lo que está por detrás de toda lucha. Un relato que como hemos dicho podría suceder en 1918 o en 1955 o en 1976 o en cualquier época y lugar donde se fuerza a los individuos a decidir cuál es y será su lugar frente a la historia.
Para informes comunicarse a lafosforera@gmail.com o andyfeiguin@gmail.com